Portada de "No soy un PSICÓPATA" Los crímenes de Sobrellano. (Pinta y Olivares 4)
Como veis ya tenemos la portada de "No soy un PSICÓPATA. Los crímenes de Sobrellano". Se trata de la cuarta entrega de los inspectores de la Jefatura Superior de Policía de Cantabria María Pinta y Diego Olivares.
El diseño es obra del maestro José Aguilar García. Si queréis saber más sobre su espectacular trabajo echad un vistazo a su página web.
Es puro arte en todas las disciplinas que toca: https://www.joseaguilarilustrador.com/ilustracion
Esta portada que veis arriba es la que irá en el kindle, (e-book de Amazon). Como sabéis muchos de vosotros tengo todas mis novelas en exclusiva en esta plataforma desde hace años por motivos relacionados con experiencias, digamos, poco satisfactorias, por no entrar en detalles, con algunas editoriales.
La portada que veis justo aquí debajo es la del formato papel.
José Aguilar muestra una serie de elementos que tienen su peso en la trama, tanto en el planteamiento, como en su desarrollo, y por supuesto, en el desenlace. En el frontal, (derecha) incluso el personaje lo ha retratado a la perfección, la seguridad de la que hace gala. La papelera, los periódicos, incluso la perrita, todo tiene su protagonismo.
En la contraportada, una caja de cerillas y un par de ilustraciones que recogen los majestuosos edificios construidos en Sobrellano (Comillas, Cantabria, España) a finales del SXIX y que dan nombre al subtítulo de la novela: Los crímenes de Sobrellano. Hablo de El Capricho de Gaudí. La Capilla Panteón junto con el Palacio de Sobrellano. Todo, como en la portada, tiene su protagonismo en la novela.
Quiero daros las gracias por vuestro interés, apoyo, y las constantes muestras de ánimo. Ojalá que esta cuarta entrega de Pinta y Olivares se encuentre a la altura de vuestras expectativas. Este es el objetivo de mi trabajo. ¡Gracias! :)
Para aquellos que no habéis leído la sinopsis o no la leéis bien en la contraportada os la dejo a continuación:
SINOPSIS
No soy un PSICÓPATA
L o s c r í m e n e s d e S o b r e l l a n o
(Pinta y Olivares 4)
Investigando el paradero de dos jóvenes de Santander, los inspectores María Pinta y Diego Olivares se encuentran con una serie de asesinatos y desapariciones que no parecen guardar ninguna relación entre sí.
Quizá no lo guardan porque no la tienen. ¿O sí?
Sin embargo, la intuición empuja a Pinta y Olivares a plantearse si se hallan ante un asesino que no va a parar ni en pleno confinamiento. Sí, sólo intuición, nada de pruebas, apenas unos indicios para desesperación del comisario Fausto Redondo.
Un chicle, dos letras y una sucia caja de cerillas serán los hilos a los que se agarrará la investigación.
El asesino no está satisfecho con el trabajo de la policía ni con el de la prensa. Cree que no le toman en serio. Detalle que no va a perdonar.
